II Festival de las Artes Cerros Orientales
El II Festival de las Artes Cerros Orientales se llevó a cabo en el año 2023 con el objetivo de fortalecer las iniciativas artísticas de las localidades de San Cristóbal y Chapinero como una apuesta colectiva para favorecer el trabajo en red, el fortalecimiento de procesos comunitarios y la construcción colectiva de una cultura de paz.
Para esto se desarrolló un proceso de formación artística en comparsa, música, danza, costurero de la memoria y emprendimiento artístico y cultural, que motive la participación y fortalezca los procesos creativos comunitarios locales, con niños, niñas, jóvenes y comunidad en general de la UPZ 89 de Chapinero y en la UPZ 50 de San Cristóbal.
Como resultado de este proceso de formación, se programó el II Festival de Artes Cerros Orientales de Bogotá, D.C, un día en cada localidad, con componentes artísticos, festivos y pedagógicos y a manera de intercambio cultural, donde participaron artistas y agrupaciones de danza, música y porristas, además de la exposición de trabajos del costurero de la memoria.
Otro de los objetivos de este proyecto fue consolidar un Circuito de arte y cultura de los Cerros Orientales, a través del intercambio de saberes y experiencias artísticas y culturales de la red de Eventos Culturales de San Cristóbal y la red Circuito Páramo de Las Moyas. Para esto se desarrolló un encuentro virtual y otro presencial donde se trabajaron diferentes temas sobre asociatividad y emprendimientos artísticos.
Es importante desatacar que en la Localidad de Chapinero el escenario principal fue el Colegio Distrital Campestre Monteverde y se destacó la participación de la Fundación Oasis y el Kiosco de Maya. En la localidad de San Cristóbal contamos con el apoyo del colegio distrital Juan Evangelista Gómez, la Biblioteca La Victoria, la Asociación Avesol y la Alcaldía local de San Cristóbal.
En Chapinero el Festival tuvo un desfile de comparsa (producto de los talleres de Comparsa/Danza) al son de la batucada (producto de los talleres de Música). Luego vino la presentación de los artistas del barrio y localidad en la tarima. Estuvieron presentes un malabarista y solistas y agrupaciones de rap, rock, pop, reguetón y juegos tradicionales, además de la presencia del zanquero artista invitado de San Cristóbal, productos artesanales y el mapa del barrio, resultado del taller de Costurero de la Memoria. Fue una programación pensada colectivamente para jóvenes de la comunidad.
En San Cristóbal la actividad se desarrolló en el colegio Juan Evangelista Gómez y en el barrio donde se inició con un desfile y comparsa, como producto de los talleres de Música y de Comparsa/Danza, con el grupo de danza indígena. Los artistas presentados fueron de rap, reguetón, música llanera, música tradicional colombiana, coros de niños, quinteto de breakdance y los tres artistas invitados de rap de Chapinero. En este Festival hubo presencia y cubrimiento de dos medios comunitarios, Vientos Estéreo y Quira Medios.
Resultados
Durante el proceso se beneficiaron más de 350 personas entre artistas formadores, artistas locales, comunidad participante en los talleres y en el Festival, además del personal de logística, producción y promoción del proyecto.
Aprendizajes y habilidades artísticas adquiridas. Con los distintos talleres realizados en los territorios de Chapinero y San Cristóbal se pudo compartir y dar a conocer a jóvenes y adultos y adultas mayores cdonocimientos desde la danza y la música hasta de memoria y territorio. Estas nuevas condiciones pueden propiciar condiciones para que se siga en la tarea de ampliar tales aprendizajes o dejar planteadas inquietudes para que a corto o mediano plazo beneficien a nuevas iniciativas.
Inquietar en cuanto al potencial colaborativo. Trabajar en colectivo, en red, genera mayores posibilidades de proyección y de impacto, pero desafortunadamente la tendencia nuestra es a proyectarnos o hacer culturalmente en términos individuales. Con la ejecución de este proyecto aspiramos a evidenciar las ventajas del trabajo grupal, en red, pero se nota cierta resistencia al trabajo colaborativo por asuntos, creemos, como desconfianzas, por ejemplo.
Estímulos a artistas y agrupaciones. Este proyecto compartió saberes con artistas noveles, que inician su camino, pero también los reconoció en su justa dimension. Chicos y jóvenes que tuvieron la oportunidad de pararse en un escenario en un espacio público, cantando o bailando en una tarima, con sus instrumentos como una guitarra eléctrica o una muy buena batería, con la presencia de un público y también de medios comunitarios, aparte de un estímulo económico, eso anima. Eso les hace felices y son pequeñas victorias o aliciente para que insistan en sus talentos y sigan explorando.